Cobos afirmó que dará pelea por la Presidencia, pero no apura su lanzamiento

BUENOS AIRES.- El vicepresidente Julio Cobos viajó a su Mendoza natal para celebrar las fiestas en familia y, luego de unos días de vacaciones fuera del país, volverá a Buenos Aires decidido a encarar el año electoral como uno de los principales candidatos presidenciales.

A pesar de las presiones de sus pares radicales y de sus adversarios del kirchnerismo, el titular del Senado cumplió su tercer año en el Gobierno y no tiene previsto pedir licencia hasta después del verano (o entrado el otoño) para volcarse a la campaña.

Quienes más lo conocen recuerdan que, como buen maratonista, el mendocino sabe regular el ritmo de su carrera y consideran apurados a los que ya se lanzaron con todo a la pelea por la Casa Rosada.

"Están todos muy ansiosos y llegando a su techo. Cuando llegue el momento de sumar ya no van a tener nada que ofrecer", señalaron fuentes cercanas a Cobos, que entienden que la baja en la imagen del vicepresidente en las encuestas es fácilmente recuperable con dos meses de fuerte campaña. El vicepresidente insiste a sus colaboradores que es recién en el último tramo del cronograma electoral cuando la gente comienza a elegir su candidato y que hasta entonces resulta clave no involucrarse en enfrentamientos inútiles y, en cambio, trabajar en propuestas.

"¿De qué sirve hablarle de filosofía política a la gente? Hay que presentarle tres ejes claves de propuestas, porque eso es lo que le interesa", repite Cobos a sus colaboradores en alusión al estilo del diputado y precandidato presidencial Ricardo Alfonsín, su principal rival interno en la UCR.

Mientras tanto, el vice presiona en público al tercer precandidato radical, el senador Ernesto Sanz, para que cumpla su función institucional y avance en la definición de la plataforma electoral del partido y en la proclamación de candidatos en la Capital Federal y la Provincia de Buenos Aires, los dos principales distritos electorales del país.

Cobos reconoce que el titular de la UCR puede robarle algunos puntos a los dos, tanto a él como a Alfonsín, aunque entiende que el senador no tiene la necesaria inserción en la gente para pelear con posibilidades.

La propuesta para adelantar la definición de candidatos en la UCR a marzo próximo no convence al vicepresidente: "si quieren ir a ellos a internas que vayan. El ganador se enfrenta conmigo en agosto", bromea el vice en su despacho, mientras repite que será sorpresa el nombre de su compañero de fórmula.

Ante sus hombres de confianza, se muestra decidido a dar pelea, aunque también está preparado para una derrota, caso en que regresaría a Mendoza para volver a ejercer como ingeniero en construcciones, lejos de la política. (NA)